La última sesión de GestaCuentos estuvo marcada por un amplio abanico de relatos que exploraron desde la adolescencia y la pertenencia hasta la brujería y los amores truncos. Con una diversidad de estilos narrativos y temas, los participantes analizaron, debatieron y propusieron nuevas perspectivas para cada historia.
Diana presentó un cuento sobre Laura y Ana, dos adolescentes cuya amistad se cimenta en retos peligrosos. El grupo profundizó en los perfiles de las protagonistas, destacando la inseguridad de Laura y la rebeldía de Ana, y reflexionó sobre la influencia del entorno escolar en la narrativa. Se discutió si la historia debía situarse en una escuela pública, privada o religiosa y cómo el contexto histórico podía influir en el lenguaje de los personajes. La discusión también giró en torno a la evolución del habla juvenil y la atemporalidad del cuento, concluyendo que el final era realista y melancólico.
Mireya compartió su relato “Hilos Invisibles”, en el que una mujer descubre las actividades ocultas de su esposo. La historia fue analizada en términos de puntuación y estructura, con sugerencias para mejorar la claridad del texto. Posteriormente, el grupo discutió el cuento “Y los invisibles”, que narra la experiencia de una mujer cuyo esposo practica magia negra para retenerla a su lado. Se analizaron los elementos ritualísticos y se propusieron modificaciones en la descripción de los detalles místicos para potenciar la atmósfera del relato.
La temática de la brujería continuó con la historia personal de Mireya sobre su exmarido y el descubrimiento de mensajes de brujería en su celular. El grupo sugirió diversas estrategias narrativas, como el uso de múltiples voces y el celular como un personaje con vida propia. Se propuso expandir la historia a capítulos más largos para profundizar en los personajes y sus motivaciones.
En un ejercicio de escritura, Carla propuso la frase “La libertad no hace feliz al hombre, lo hace sencillamente hombre” como detonante para la próxima sesión. Mientras tanto, Antonio compartió el final de su novela, en el que un concierto y el Adagio for Strings de Samuel Barber marcan el cierre de una historia de amor y pérdida. La escena final, en la que el protagonista se despide de su amante fantasma y de la casa gris, recibió elogios por su simbolismo y carga emocional.
Luzma presentó dos cuentos cortos, “Epitafio”, sobre un amor no correspondido con un perro, y otro relato sobre violencia doméstica. El grupo sugirió ajustes en los tiempos verbales y detalles narrativos para fortalecer el impacto de ambas historias. La sesión concluyó con una reflexión sobre las transiciones en la vida y la manera en que la literatura permite explorar estas transformaciones.
Con cada reunión, GestaCuentos sigue consolidándose como un espacio de experimentación y aprendizaje, donde las historias evolucionan a través del diálogo y la crítica constructiva.